Obtener la categoría de Orquesta Revelación de 1995 en la Gran Anual de “Mi Salsa”, programa televisivo donde compiten jóvenes salseros, presupone un trabajo artístico destacado dentro del marco cubano. Si a ellos se les suma rigor, gracia y estilo propio y temas novedosos además de un timbre sonoro que los disqtingue, entonces no cabe duda que hablamos de Bamboleo.

Esta agrupación nacida el 14 de febrero de 1995 como resultado de la unión de jóvenes graduados de las mejores escuelas de arte, con promedio de edad de 25 años, asumió el reto de incursionar en distintos géneros como la salsa, el son, la música afrocubana, el jazz latino el bolero y la balada. Su mayor propósito: entregar todo lo heredado de los grandes maestros de la música popular bailable de Cuba al resto del mundo. El debut de Bamboleo tuvo gran aceptación en la salsa de altos quilates como el Palacio de la Salsa, Salón Rosado de la Tropical, Cabaret Caribe, Casa de la Música, Splash de Varadero, Café Mi Habana del Teatro Nacional donde han compartido escenario con las mejores bandas del país, entre las que se encuentran Juan Formell y Los Van Van, David Calzado y La Charanga Habanera, José Luis Cortés y NG La Banda, Adalberto Álvarez y su Son, Issac Delgado y Manolín, El Médico de la Salsa.

Seleccionados para representar Cuba en el XV Festival de Jazz Latino “Plaza 95”, Bamboleo se gana el título de Revelación del Año también en ese festival.
Muchos preguntan cuál ha sido la fórmula para alcanzar en tan corto tiempo la aceptación del público, y en medio de la mayor confirmación musical de bandas cubanas de gran calidad. La respuesta está en su propio nombre, Bamboleo ( no se mantiene estático).

Lázaro Valdés Junior Director de esta banda, es inquieto compositor y arreglista que sabe lo que el público más exigente quiere para su disfrute, es de ahí que los arreglos musicales tengan que ver con dicha exigencia. A lo anterior se agrega la presencia de dos excelentes cantantes que son la imagen de Bamboleo, con un timbre muy especial para la salsa, el resto es el trabajo de equipo con el fin de satisfacer al bailador con las más sublimes melodías.